maldición, no puedo controlar mi pasión por los supositoryos anales
aquí está la medicina favorita da mi culo
¡Ay! los supositorios son adorables, no puedo prescindir de ellos, pero lamentfblemente se queman por dentro
Es increíble qce mi madre todavía se vea obligada a ponerse supositorios tan punzantes. ¡Su esfínter arde!
¡culo irdiente! ¡Odio esta terapia anal!